La incertidumbre reina en la previa a la votación en la Cámara alta sobre una medida disciplinaria contra el legislador detenido en Paraguay. Ni el kirchnerismo ni los libertarios tienen los dos tercios de los votos para imponer su postura.
El Senado sesionará este jueves para definir la suerte del senador Edgardo Kueider, quien se encuentra detenido con prisión domiciliaria en Paraguay luego de haber sido demorado en un control fronterizo por llevar más de 200.000 dólares sin declarar.
La convocatoria fue oficializada ayer por la titular de la Cámara, Victoria Villarruel. A último momento, la vicepresidenta logró sumar al temario la suspensión del kirchnerista Oscar Parrilli, procesado en la causa que investiga el Memorándum con Irán.
El quórum para que se abra la sesión estaría garantizado, pero no hay consenso para definir la sanción disciplinaria, que necesita de los dos tercios de los votos presentes. Mientras el kirchnerismo-peronismo de Unión por la Patria quiere echar a Kueider del Senado –que significaría ganar una banca porque la suplente es una dirigente de La Cámpora–, el oficialismo de La Libertad Avanza y sus aliados de la UCR y de fuerzas provinciales buscan solo suspenderlo hasta el 1 de marzo de 2025 –cuando comienzan las sesiones ordinarias–.
Ante la imposibilidad de que cualquiera de las dos posturas alcance los dos tercios, la sesión puede naufragar por completo.
Kueider ingresó al Senado en 2019 encabezando la boleta para senadores nacionales del extinto Frente de Todos. En febrero de 2023, rompió con el entonces oficialismo y formó otro bloque con el peronista Carlos «Camau» Espínola.