Un equipo en Texas consiguió traer de vuelta a este legendario depredador prehistórico mediante técnicas de ingeniería genética. El primer ejemplar ya dio señales de vida con un poderoso aullido.
Un equipo de científicos del Laboratorio de Biotecnología de Texas anunció un hito histórico: lograron revivir al lobo terrible (Canis dirus), una especie que habitó América del Norte y se extinguió hace más de 10.000 años. El proyecto, que lleva años de desarrollo, combinó ADN extraído de fósiles bien conservados con técnicas de edición genética similares a las utilizadas en la clonación.
El ejemplar fue gestado con éxito en el vientre de una loba gris moderna, adaptada genéticamente para poder albergar al embrión. Según los investigadores, el animal nacido posee una estructura corporal robusta, una mandíbula más poderosa que la de los lobos actuales y un pelaje más espeso. Su nacimiento fue celebrado como un paso revolucionario en la biotecnología aplicada a la conservación y la de-extinción de especies.
El equipo de investigación detalló que el primer aullido del lobo terrible fue registrado y analizado, confirmando diferencias sonoras notables respecto al de los lobos actuales. Los científicos lo interpretan como una señal positiva del estado de salud y desarrollo del ejemplar, que se encuentra bajo constante monitoreo en un entorno controlado.
Más allá del impacto científico, el proyecto reabre debates éticos sobre la manipulación genética y la recreación de especies extintas. Organismos conservacionistas celebran el avance, pero también advierten sobre los riesgos de introducir especies prehistóricas en ecosistemas modernos sin conocer del todo sus efectos. Por ahora, no se contempla liberar a los ejemplares en la naturaleza.
Este logro marca un precedente en los estudios de biotecnología evolutiva y podría abrir la puerta a la recuperación de otras especies extintas. Para los científicos detrás del proyecto, el lobo terrible es solo el comienzo de una nueva era en la relación entre ciencia y biodiversidad.