El proceso se llevará adelante pese a que los imputados iraníes nunca se presentaron ante los tribunales argentinos.
La Justicia argentina resolvió avanzar con el juicio en ausencia contra los acusados iraníes por el atentado a la AMIA, ocurrido en 1994 y que dejó un saldo de 85 muertos y cientos de heridos. La decisión marca un paso clave en una causa que lleva más de tres décadas sin sentencia definitiva.
La medida fue adoptada luego de años de reclamos por parte de familiares de las víctimas y organizaciones de la comunidad judía, que ven en el juicio en ausencia una herramienta para evitar la impunidad. Hasta el momento, los acusados nunca respondieron a los pedidos de comparecencia de los tribunales nacionales.
El proceso judicial se apoyará en la nueva normativa que habilita este mecanismo, contemplando todas las garantías procesales y la posibilidad de representación legal para los imputados. Según remarcaron fuentes judiciales, el objetivo es asegurar un avance efectivo en la búsqueda de justicia.
El atentado a la AMIA sigue siendo uno de los episodios más dolorosos de la historia argentina reciente. Con esta resolución, se abre una etapa inédita en el camino judicial que podría finalmente acercar respuestas a los familiares y a la sociedad en su conjunto.