El joven de 16 años fue arrestado tras una alerta del FBI y una investigación de la UFECI. En su domicilio encontraron réplicas de armas, bombas molotov y material vinculado al supremacismo blanco. Planeaba un atentado inspirado en ataques terroristas internacionales.
Un adolescente de 16 años fue detenido en el barrio porteño de Caballito acusado de planear una masacre en su antigua escuela. La investigación se inició luego de una alerta del FBI, que detectó en la red social X (antes Twitter) un perfil que publicaba amenazas concretas de realizar un ataque durante noviembre. El operativo fue encabezado por la Policía Federal Argentina (PFA) y coordinado por la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI), a cargo del fiscal Horacio Azzolín.
El joven, cuya identidad se mantiene en reserva, fue arrestado en su departamento de la avenida Juan Bautista Alberdi al 1600. Durante el allanamiento, los agentes encontraron un arsenal casero que incluía réplicas de fusiles —algunos con símbolos nazis y nombres de tiradores masivos como Brenton Tarrant y Anders Breivik—, armas blancas, bombas molotov, balas de goma, gas pimienta y material relacionado con el supremacismo blanco. También se secuestró un cuaderno con anotaciones detalladas del plan y una carta suicida.
Según las investigaciones, el adolescente pretendía ingresar a su exescuela vestido de policía para tomar por sorpresa a los estudiantes y docentes. Su plan imitaba el modus operandi del atentado perpetrado por Anders Breivik en Noruega en 2011, en el que fueron asesinadas 77 personas. Además, habría considerado generar una amenaza previa en un centro comercial cercano para distraer a las fuerzas de seguridad.
El caso quedó a disposición del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°1, a cargo de la jueza María Romilda Servini, quien ordenó su evaluación psiquiátrica. Por el momento, la causa está caratulada como “intimidación pública”, aunque no se descarta que se amplíen los cargos. Desde la Policía Federal destacaron la cooperación internacional y el monitoreo de redes como herramientas clave para prevenir ataques de este tipo, que en otros países han terminado en tragedias.
			





