El Eras Tour y la fiebre que despierta la artista se traduce en beneficios económicos para nuestro país.
El fenómeno Taylor Swift es, ya lo dijo la Reserva Federal de los Estados Unidos, no solo un suceso artístico de mega escala global sino que también económico. En cada ciudad a la que llega la cantante norteamericana, no solo se revolucionan sus fans sino también la actividad turística, impulsando los niveles de consumo durante el período en el que se extienden sus shows.
Aviones llenos con chicas que vienen de otros países de Latinoamérica y de las provincias para verla, micros repletos circulan por las rutas argentinas hacia la Capital, que ya tiene los hoteles al tope prácticamente, cuentas para pulseras que tienen un nombre específico, colas con carpas por semanas y hasta meses, merchandising por doquier, todo eso generan los recitales de Taylor Swift en el estadio de River.
Eso despertó el interés del instituto de investigaciones de la Fundación Mediterránea, IERAL, para estudiar el impacto a nivel local de los recitales de grandes figuras y bandas internacionales y también locales. La conclusión fue que los eventos de mayor magnitud pueden llegar a aportar un movimiento mayor a los USD 10 millones por mes. Según el análisis del IERAL, en los últimos cuatro meses del 2023 se computan unos 80 recitales en la Ciudad de Buenos Aires y aledaños, de los cuales el 35% de ellos se realizarán solamente en el mes de noviembre. Solo en esos eventos podrían participar alrededor 1,8 millones de personas. En ese contexto, Taylor Swift es quien más repercusión generó con sus recitales y también la que protagonizó la mayor cantidad búsquedas online sobre sus conciertos nacionales e internacionales en Argentina.
Las friendship bracelets, con cuentas de colores y letras, se han convertido en un símbolo esencial para los swifties. Las fans se dieron a la tarea de crear estas pulseras que luego intercambian en los conciertos de la artista. Los mayoristas que venden las cuentas y los hilos para crearlas reportaron un incremento en los pedidos para generar estos accesorios con precios que oscilan desde los $1.500 hasta los $4.000 dependiendo de si se compra mayorista o minorista. El merchandising de Taylor Swift es omnipresente, desde las remeras hasta los buzos con precios que superan los $65.000.
Además, el precio de los pasajes, que varía desde los $30.000 hasta los $160.000, no disuade a los fans que viajan largas distancias para presenciar el espectáculo. El alojamiento en hoteles de la ciudad se ha convertido en otro componente clave de la economía swiftie. Desde opciones más económicas en el centro hasta lujosos hoteles en Palermo, Belgrano o Recoleta, los precios por noche oscilan entre los u$s100 y los u$s500. Incluso aquellos que optan por acampar contribuyen a la economía local con gastos diarios que van desde los $3.500 hasta los $8.000.
“Existen consumos indirectos asociados durante los eventos y en el marco de otras actividades turísticas relacionadas en el caso de personas que viajen de otros lugares para participar de los eventos”, explicó la entidad lo que permite suponer que la estimación es un mínimo de los ingresos que dejan los shows como el de la estrella Taylor Swift.