El brote ya provocó 15 fallecimientos y al menos 66 personas afectadas en distintas provincias. Las autoridades investigan el origen y la distribución de la sustancia.
Un brote de intoxicación por fentanilo contaminado encendió las alarmas sanitarias en todo el país. Ya se confirmaron 15 muertes y 66 personas afectadas, algunas de ellas en estado crítico. El fenómeno, que se detectó en distintos puntos del territorio nacional, generó preocupación entre especialistas y autoridades sanitarias, que buscan frenar la propagación de una sustancia altamente peligrosa.
El fentanilo es un opioide sintético de uso médico, pero su circulación ilegal y su potencia lo han convertido en una amenaza creciente. En este caso, la preocupación se agravó por la presencia de contaminantes aún no identificados que habrían potenciado sus efectos, provocando colapsos respiratorios casi inmediatos en los consumidores. Las investigaciones están a cargo de fuerzas de seguridad y organismos de control sanitario.
Desde el Ministerio de Salud se emitió una alerta epidemiológica y se solicitó a los centros de salud públicos y privados que refuercen los protocolos de atención ante posibles nuevos casos. También se difundieron recomendaciones a la población para evitar el consumo de sustancias de origen desconocido, especialmente en entornos recreativos o informales.
La situación despertó un fuerte reclamo de organizaciones que trabajan en reducción de daños y adicciones, quienes insisten en la necesidad de implementar políticas públicas más efectivas. Piden que se amplíe el acceso a servicios de atención, que se distribuya naloxona —el antídoto frente a sobredosis de opioides— y que se priorice la prevención por sobre la criminalización del consumo.
Mientras tanto, continúan los operativos para identificar el origen del fentanilo contaminado y desarticular posibles redes de distribución. El caso dejó al descubierto una vez más los riesgos del mercado ilegal de drogas, pero también las fallas del sistema para ofrecer respuestas rápidas ante emergencias de salud pública.








