Un ataque israelí impactó en el templo católico de Gaza, provocó la muerte de dos mujeres y dejó herido al sacerdote argentino que reside allí.
Un bombardeo en la Franja de Gaza alcanzó la única iglesia católica del enclave, dejando un saldo trágico de dos mujeres muertas y varios heridos, entre ellos el sacerdote argentino Gabriel Romanelli, párroco del lugar. El ataque se produjo en el marco de los enfrentamientos que continúan azotando la región desde octubre del año pasado.
La iglesia afectada es parte del complejo de la Sagrada Familia, en el que también funciona una escuela y un centro de asistencia. Según informaron fuentes locales, el templo quedó seriamente dañado por el impacto, lo que obligó a evacuar a decenas de personas que se refugiaban allí desde el inicio del conflicto.
Romanelli, que pertenece al Instituto del Verbo Encarnado, fue alcanzado por esquirlas pero se encuentra fuera de peligro. El sacerdote se desempeña en la zona desde hace años y había ganado notoriedad por su labor humanitaria en medio de los bombardeos.
Las dos víctimas mortales, una madre y su hija, habían encontrado resguardo en el templo tras haber perdido su hogar. La comunidad local denuncia que no había presencia de milicianos en la zona, y reclama protección para los civiles que buscan refugio en espacios religiosos.
El ataque generó una fuerte condena por parte de organizaciones internacionales y de sectores de la Iglesia Católica, que pidieron el cese de los bombardeos sobre zonas residenciales y humanitarias. Mientras tanto, el conflicto continúa escalando sin señales de una tregua cercana.