La entidad rural advirtió que la situación afecta gravemente a la producción agropecuaria bonaerense y reclamó medidas urgentes al Gobierno.
La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) emitió una dura advertencia sobre el impacto de las intensas lluvias que en las últimas semanas dejaron más de un millón de hectáreas bajo el agua en territorio bonaerense. La entidad calificó la situación como “una crisis histórica” y advirtió que las consecuencias económicas y sociales serán profundas si no se adoptan medidas inmediatas.
Los productores de distintas regiones señalaron que los campos anegados impiden la actividad ganadera y agrícola, lo que pone en riesgo tanto las campañas de siembra como la alimentación del ganado. A esto se suma la dificultad para transitar por caminos rurales, con localidades prácticamente aisladas por el avance del agua.
Desde CARBAP exigieron respuestas urgentes a las autoridades nacionales y provinciales, entre ellas la declaración de emergencia y/o desastre agropecuario en los distritos más afectados. También reclamaron asistencia financiera para los productores, al advertir que muchos de ellos se encuentran en una situación límite.
La entidad rural destacó que las inundaciones no solo afectan la producción actual, sino que podrían comprometer las perspectivas de la próxima campaña, dado el deterioro de los suelos y la imposibilidad de planificar tareas en el corto plazo.
Mientras tanto, los gobiernos municipales trabajan en conjunto con Defensa Civil para atender a las familias más perjudicadas por las inundaciones, aunque advierten que los recursos son insuficientes frente a la magnitud del problema. La incertidumbre crece entre los productores, que temen por la sostenibilidad de su actividad en medio de un escenario climático cada vez más adverso.