La violencia juvenil vuelve a estar en el centro de la escena. Jorge Luis Morales, de 28 años, fue atacado por la espalda en Orán y lucha por su vida mientras su familia exige respuestas.
La madrugada del domingo dejó una nueva escena de violencia que sacude a la ciudad salteña de San Ramón de la Nueva Orán. Jorge Luis Morales, de 28 años, fue atacado por la espalda a la salida del boliche Set y permanece en coma inducido, internado en terapia intensiva con pronóstico reservado.
Según las cámaras de seguridad, el joven fue sorprendido sin posibilidad de defenderse. Cayó al pavimento y golpeó su cabeza contra el cordón de la vereda. Desde entonces, lucha por su vida en el Hospital San Vicente de Paul.
“Mi hijo no peleó, lo atacaron a traición. Se cayó y empezó a convulsionar”, contó su madre, Elizabeth, en diálogo con Radio A de Orán. La mujer también agradeció la intervención de una médica que se encontraba en el lugar y que asistió a su hijo hasta la llegada del SAMEC. “Gracias a esa mujer, mi hijo llegó con vida al hospital”, dijo entre lágrimas.
Fuentes judiciales confirmaron que los agresores estarían identificados. La familia apunta contra un grupo de jóvenes vinculados al Club Social y Deportivo Aviación, quienes habrían protagonizado disturbios dentro del local antes del ataque. “Todo está en la denuncia. Queremos justicia y que nadie encubra a los responsables”, reclamó Elizabeth.
La investigación quedó en manos de la Fiscalía Penal N° 1 de Orán, con apoyo de la Brigada de Investigaciones y la Unidad Regional N° 2. Los peritajes sobre los videos del interior y exterior del boliche buscan establecer la participación de cada uno de los sospechosos.
El caso expone una vez más el creciente clima de violencia en la juventud y la falta de control en la noche salteña. Mientras el Estado brilla por su ausencia en la prevención y en la contención de los jóvenes, las familias terminan enfrentando solas las consecuencias.
“Quiero recordar lo que pasó con Fernando Báez Sosa. A mi hijo también lo atacaron en grupo, sin darle oportunidad de defenderse. Fue un acto de cobardía total”, expresó la madre, en una comparación inevitable que reabre el debate sobre la impunidad y la desprotección social.
Morales continúa internado en estado crítico. Su familia, acompañada por vecinos y amigos, convoca a la comunidad de Orán a colaborar con cualquier testimonio o video que ayude a esclarecer el hecho. “No queremos venganza, queremos justicia”, insistió su madre.