Javier Milei tendrá encuentros y reuniones con figuras relevantes de la política y las finanzas a nivel internacional.
El presidente Javier Milei llegó a Brasil para sumarse a la cumbre del G20 en Río de Janeiro y se prepara para una semana cargada en la que mantendrá varios encuentros con líderes mundiales. Este domingo se reunió con el presidente de Francia Emmanuel Macron, quien visitó Argentina y rindió homenaje a las monjas francesas víctimas de la dictadura militar en una emotiva ceremonia en la iglesia Santa Cruz en el barrio porteño de San Cristóbal.
El gobierno argentino tiene una posición clara sobre la agenda de desarrollo, la guerra en Ucrania y la crisis en Medio Oriente que no coincide con la postura del texto.
Brasil quiere incluir en la declaración de la cumbre la lucha contra el hambre, la política para afrontar el cambio climático y la igualdad de género, y el gobierno de Milei no apoya esa agenda. Otro de los ejes que resiste el jefe de Estado argentino es en la de cobrarle impuestos a los “superricos”.
Según informó Globo, «Milei no solo se resiste a mencionar en el texto final la tributación de los superricos, sino que también quiere retrotraer los términos utilizados en el texto firmado en octubre, en Washington, por los ministros de Finanzas y los presidentes de los Bancos Centrales».
Las deliberaciones de la cumbre de presidentes y jefes de Estado se realizará en un escenario de incertidumbre por las posiciones que sugiere Brasil respecto a la invasión ejecutada por Putin, la responsabilidad de Israel en el conflicto de Gaza y la propuesta vinculada al pacto global contra el hambre y la pobreza.
Además, Brasil quiere incluir en la declaración de la cumbre la lucha contra el hambre, la política para afrontar el cambio climático y la igualdad de género; esa agenda no es la que lleva el presidente argentino.