Tras el accidente que dejó al menos 19 heridos en Liniers, el juez Julián Ercolini abrió una causa judicial y ordenó peritajes para determinar las causas del descarrilamiento. El motorman dio negativo en los controles de alcoholemia y drogas, mientras continúan las pericias sobre las vías y la formación.
El descarrilamiento del tren Sarmiento en las inmediaciones de la estación Liniers derivó en la apertura de una causa judicial y en una serie de peritajes para esclarecer las causas del siniestro. El juez federal Julián Ercolini, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N.º 12, dispuso la investigación por “interrupción a los medios de transporte”, tras la intervención de la Policía Federal y la confirmación de al menos 19 personas heridas.
Aunque en un principio se informó que no había pasajeros lesionados, luego se confirmó que 20 personas debieron recibir atención médica. Durante la noche del martes, Trenes Argentinos logró restablecer parcialmente el servicio, aunque dos vías permanecieron inhabilitadas por la presencia de la formación siniestrada, lo que requirió la intervención de un tren de auxilio proveniente de Haedo.
Las tareas de encarrilamiento y reparación se extendieron durante la madrugada del miércoles, utilizando gatos hidráulicos y bajo la supervisión de peritos de la Policía Federal, que analizaron las vías, los durmientes y los vagones afectados. En paralelo, se realizaron los controles de alcoholemia y narcóticos al maquinista y a los banderilleros, todos con resultados negativos.
El motorman permanece demorado en una clínica de Castelar, mientras los investigadores evalúan si el accidente se produjo por un error humano o una falla técnica vinculada a obras recientes en la zona. Según fuentes de Trenes Argentinos, el sector había sido objeto de trabajos de remodelación durante el último mes y el cambio de vías en ese punto se realiza de manera diaria, lo que plantea nuevos interrogantes.
El juez Ercolini decidió abrir la causa de oficio, dado el carácter público del hecho y la intervención de las fuerzas de seguridad. El accidente ocurrió alrededor de las 15:50, cuando una formación que cubría el trayecto entre Moreno y Once se descarriló a la altura del cruce de Barragán. Testigos relataron escenas de humo y tensión, mientras el SAME desplegó un amplio operativo con 40 móviles.
“Lo más importante es que no hay víctimas fatales”, aseguró el titular del SAME, Alberto Crescenti. Diez de los heridos fueron trasladados a distintos hospitales porteños, entre ellos el Santojanni, el Vélez Sársfield y el Álvarez. Bomberos de la Ciudad también participaron del rescate y confirmaron que trabajaron con cuatro dotaciones para asistir a los pasajeros y asegurar el área del siniestro.





