Tras la aprobación en Diputados de medidas con impacto presupuestario, el Ejecutivo advirtió que no permitirá retrocesos en su política de ajuste.
El Gobierno nacional confirmó que vetará cualquier proyecto de ley aprobado por el Congreso que implique un aumento del gasto público sin la correspondiente compensación presupuestaria. La decisión fue comunicada tras la media sanción en Diputados de iniciativas como el aumento a jubilaciones y la restitución de la moratoria previsional.
Desde el Ejecutivo insistieron en que el equilibrio fiscal es una prioridad innegociable para la gestión y remarcaron que no se dará marcha atrás en la política de reducción del déficit. “Todo proyecto que lo comprometa será rechazado”, afirmaron fuentes oficiales.
La postura del Gobierno se produce en un contexto de creciente tensión entre la Casa Rosada y sectores de la oposición, que impulsan leyes con alto impacto social pero también fiscal. Las autoridades consideran que este tipo de medidas, aunque bienintencionadas, ponen en riesgo la estabilidad macroeconómica.
La advertencia también fue leída como una señal al mercado y a los organismos internacionales de crédito, en momentos en que el Gobierno busca mantener el respaldo a su programa económico. El presidente ha reiterado en varias oportunidades que no permitirá desvíos en el rumbo fiscal acordado.
Por su parte, desde la oposición rechazaron las amenazas de veto y acusaron al Gobierno de priorizar los números por sobre la calidad de vida de los sectores más vulnerables. Legisladores adelantaron que continuarán promoviendo iniciativas que respondan a la emergencia social, aún a riesgo de confrontar con el Poder Ejecutivo.