En total, hay siete imputados, entre los que se encuentran el neurocirujano Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov.
El juicio por la muerte de Diego Armando Maradona tiene a siete imputados. Desde las 9.30, estarán sentados en el banquillo de los acusados el neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el enfermero Ricardo Almirón, su jefe Mariano Perroni, el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna, la médica coordinadora de Swiss Medical, Nancy Edith Forlini y el psicólogo Carlos Díaz. Todos fueron imputados por «homicidio simple con dolo eventual».
De acuerdo a lo establecido en el Código Penal, este delito prevé una pena que va de los 8 a los 25 años de cárcel.
Leopoldo Luque (43 años): el neurocirujano era el médico personal de Maradona y fue quien solicitó su externación tras la cirugía por el hematoma subdural. Los fiscales Cosme Iribarren, Laura Capra y Patricio Ferrari consideran que omitió ofrecer información sobre la salud de Diego a las hijas, Dalma, Gianinna y Jana, además de falsificar una firma del Diez en un pedido de historia clínica. Está imputado por restarle importancia a los síntomas compatibles con una insuficiencia cardíaca, no seguir los controles ni convocar a especialistas.
Agustina Cosachov (40): la psiquiatra es otra de las acusadas más complicadas y está imputada por haber falsificado presuntamente un certificado médico de una visita que nunca realizó. La Fiscalía sostiene que la profesional no reguló la ingesta de la medicación de forma personal y aseguró a los hijos de Maradona que lo que ocurría era consecuencia de «la espontánea decisión del paciente».
Ricardo Almirón (41): el enfermero está acusado de no cuidar a Maradona, al igual que Gisela Dahiana Madrid.
Pedro Pablo Di Spagna (52): el médico está apuntado por no controlar el estado de salud del campeón del mundo con la Selección Argentina. Además, según la acusación, solo habría concurrido dos veces a la casa del country de Tigre.
Carlos Díaz (33): el psicólogo está imputado por interceder en la toma de decisiones médicas sobre Maradona.
Nancy Edith Forlini (56): era la coordinadora de la gerencia de cuidados domiciliarios en la prepaga Swiss Medical y está acusada de no cumplir con los deberes a su cargo, entre ellos, brindar el servicio de cuidado adecuado para el Diego.
Mariano Perroni (44): era el jefe de los enfermeros Almirón y Madrid, y se encargaba de coordinar las tareas de ambos imputados. Para los fiscales, escribió planillas con información que no coincidía con «el real estado y atención médica que Diego Armando Maradona recibía».
Dahiana Gisela Madrid (40): la enfermera admitió haber escrito un informe falso sobre un intento de control y negativa de Maradona durante la mañana de su fallecimiento.