La medida fue anunciada por el presidente español, Pedro Sánchez, durante su exposición ante los diputados.
España, Irlanda y Noruega anunciaron que reconocerían un Estado palestino el 28 de mayo, afirmando que esperaban que otros países occidentales siguieran su ejemplo, lo que llevó a Israel a retirar a sus embajadores.
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, anunció ante el Congreso de los Diputados que la medida pretendía acelerar los esfuerzos para garantizar un alto el fuego en la guerra de Israel contra Hamás en Gaza.
«Ha llegado la hora de pasar de las palabras a la acción. Por la paz, la justicia y la coherencia», expresó el jefe del Gobierno español.
El taoiseach irlandés, Simon Harris, anunció la decisión en una conferencia de prensa en Dublín. Añadió que Irlanda reconocía inequívocamente el derecho de Israel a existir «de forma segura y en paz con sus vecinos» y pidió la devolución inmediata de todos los rehenes de Gaza.
En Oslo, el primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, afirmó que la única solución política posible entre israelíes y palestinos es la de «dos Estados que convivan en paz y seguridad».
Por su parte, el ministro israelí de Asuntos Exteriores, Israel Katz, ordenó el regreso inmediato de los embajadores israelíes de los tres países para celebrar consultas y advirtió de nuevas «graves consecuencias».
«Hoy envío un mensaje claro: Israel no será complaciente con quienes socavan su soberanía y ponen en peligro su seguridad», dijo.