El pontífice argentino, líder de la Iglesia Católica durante 17 años, murió este lunes en el Vaticano tras una larga enfermedad.
El Papa Francisco, nacido Jorge Mario Bergoglio en Buenos Aires, falleció este lunes 21 de abril de 2025 a los 88 años en la Casa Santa Marta, su residencia en el Vaticano. Su deceso se produjo a las 7:35 horas, según informó el cardenal Kevin Farrell. La noticia ha conmovido al mundo entero, especialmente a América Latina, donde su figura fue un símbolo de cercanía y justicia social.
Francisco había sido hospitalizado en febrero por una neumonía bilateral que derivó en complicaciones respiratorias y renales. Tras un largo proceso de recuperación, su última aparición pública fue el domingo de Pascua, cuando ofreció la bendición Urbi et Orbi desde el balcón de la basílica de San Pedro. En esa ocasión, condenó la carrera armamentista y pidió por la paz mundial.
Durante su pontificado, Francisco se destacó por su enfoque pastoral y su compromiso con los más desfavorecidos. Promovió la inclusión de las mujeres en roles de liderazgo dentro de la Iglesia, defendió el medio ambiente y abogó por la paz y el diálogo interreligioso. Su estilo sencillo y su cercanía con la gente lo convirtieron en una figura admirada más allá de los círculos católicos.
Tras su muerte, el Vaticano ha iniciado el período de Sede Vacante, durante el cual se convocará un cónclave para elegir a su sucesor. Se espera que el cuerpo del Papa sea trasladado el miércoles a la basílica de San Pedro, donde los fieles podrán rendirle homenaje.
El legado de Francisco perdurará como un testimonio de fe, humildad y compromiso con un mundo más justo y solidario. Su partida deja un vacío en la Iglesia Católica, pero también una inspiración para seguir trabajando por la paz y el bienestar de todos.