El reciente ataque israelí al sur de Gaza amenaza el alto al fuego alcanzado con Hamas y reaviva la tensión en Oriente Medio.
Fuerzas militares israelíes lanzaron bombardeos en la región sur de la Franja de Gaza luego de que Hamas realizara lo que Israel calificó como un “ataque de provocación”. El operativo se diseñó como represalia y logró impactar posiciones señaladas como estratégicas por el Estado hebreo.
El intercambio de hostilidades pone en riesgo el acuerdo de paz que las partes habían alcanzado recientemente. Aunque el entendimiento había logrado una desescalada temporal, la respuesta militar israelí indica que la tregua se encuentra en precario equilibrio.
Organismos internacionales, entre ellos las Naciones Unidas, expresaron su preocupación por la vuelta a la violencia. Instaron a ambas partes a retomar el diálogo urgente y a evitar que la población civil vuelva a pagar las consecuencias del conflicto.
Por su parte, desde la comunidad palestina declararon que la acción militar israelí viola los términos del acuerdo y anunciaron medidas diplomáticas mientras monitorean el desarrollo de los acontecimientos. La situación permanece en ebullición internacional.