El presidente electo anunció que disolverá el organismo que hoy se encarga de controlar los precios en el mercado interno y de habilitar los permisos para importar.
El presidente electo, Javier MiIlei, confirmó que eliminará la Secretaría de Comercio Interior «en el sentido que le dieron históricamente los gobiernos». El libertario ya se ha expresado en reiteradas ocasiones en contra de las regulaciones de precios, y sostuvo que buscará una liberación de la mayor cantidad posible de precios lo más rápido posible.
En esa línea, agregó que piensa liberar «todos los precios que pueda», aunque hay algunos que todavía no podrá hacerlo «por las características de las bombas que dejó plantadas el Gobierno actual». El dirigente electo de La Libertad Avanza afirmó que «en este momento están sentadas las bases para una hiperinflación peor que la de Alfonsín. Eso sería un porotito».
Estas declaraciones coinciden con los planteos que ha ido haciendo Milei durante todo el tiempo que duró la campaña. Como el nombre de su fuerza política lo dice, el economista no cree en los controles, sino en que los precios sean regulados por la oferta y la demanda. En este sentido, con el fin de la Secretaría de Comercio como hoy existe, se acabará el programa Precios Justos y las empresas serán libres de aumentar lo que necesiten para cubrir sus costos. Ya comenzaron a hacerlo, de a poco.
Las mayores dudas respecto del cierre de Comercio tal como se la conoce hoy -tal vez permanezca con un rol muy inferior para tratar las cuestiones de defensa de la competencia, por ejemplo- es qué sucederá con el Sistema de Importaciones de la Argentina (SIRA), que hoy maneja Tombolini conjuntamente con el titular de la Aduana y mano derecha de Sergio Massa, Guillermo Michel, y la AFIP. También interviene el Banco Central (BCRA) por la disponibilidad de las divisas.