Líderes de la región, entre ellos Lula da Silva, se sumaron a la iniciativa que denuncia una persecución judicial contra la exmandataria argentina.
La campaña internacional Cristina Libre continúa sumando adhesiones en América Latina. En las últimas horas, el presidente de Brasil, Luiz Inácio “Lula” da Silva, manifestó públicamente su apoyo a la iniciativa, que denuncia una presunta persecución judicial contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Desde el entorno de la exmandataria agradecieron el respaldo y destacaron la creciente preocupación regional por el uso del lawfare como herramienta de disciplinamiento político.
El respaldo de Lula se dio en el marco de un acto público, donde cuestionó los procesos judiciales que, según denunció, buscan proscribir a dirigentes populares en la región. El mandatario brasileño comparó la situación de Cristina con la que él mismo enfrentó años atrás, cuando fue encarcelado en medio de causas que luego fueron anuladas por irregularidades.
La campaña Cristina Libre se lanzó formalmente en junio y ya cuenta con el apoyo de dirigentes, legisladores, referentes de derechos humanos y organizaciones sociales de México, Brasil, Bolivia y otros países de la región. La iniciativa busca visibilizar lo que consideran una estrategia sistemática de persecución política mediante causas judiciales sin las debidas garantías.
En México, el movimiento fue presentado en espacios académicos y culturales, mientras que en Bolivia se sumaron representantes del MAS y exfuncionarios del gobierno de Evo Morales. En todos los casos, se repite una consigna: denunciar la judicialización de la política y defender la democracia.
El equipo que impulsa la campaña anticipó nuevas acciones para las próximas semanas, que incluirán presentaciones en organismos internacionales y encuentros con representantes de Naciones Unidas. En paralelo, continúa la difusión de contenidos audiovisuales y materiales gráficos con el objetivo de alcanzar mayor repercusión en medios internacionales.
Desde el entorno de Cristina Kirchner sostienen que las causas judiciales que la involucran carecen de sustento jurídico y buscan apartarla de la vida política. Aunque la exmandataria no ha confirmado ninguna candidatura, el relanzamiento de su figura en el plano internacional refuerza su centralidad en el tablero político argentino.