Pocos minutos después del discurso que dio por cadena nacional el presidente Javier Milei comenzaron varios cacerolazos en distintos barrios de la Ciudad, como así también en el conurbano bonaerense y algunas ciudades del interior del país. Hubo una masiva concentración espontánea frente al Congreso.
El número de afectados llegó a bordear el millón de usuarios, pero se redujo en horas de la tarde. El gobierno subrayó que se trató de un “temporal sin precedentes”.
Se trata de la implementación de Carga a Bordo, la nueva medida que se aplicará en el AMBA y que permitirá a los usuarios validar la carga dentro del colectivo.