El acto del 25 de Mayo sella el aislamiento presidencial, en medio de la crisis y la tensión por las candidaturas
Cristina Kirchner se reservó el lugar de convocante. Y Alberto Fernández no fue invitado. Se esperan algunos trazos sobre el camino electoral. El contexto es doble: un gobierno con gestión reducida y un desafío que suma caída del consumo a la inflación