El ingreso de los fondos fue confirmado para este martes y se enmarca en el nuevo acuerdo firmado por el Gobierno con el organismo internacional.
Este martes, el Gobierno nacional recibirá el primer desembolso del Fondo Monetario Internacional (FMI) por un total de USD 12.000 millones. El ingreso de los fondos fue confirmado por el Ministerio de Economía y representa un paso clave en el marco del nuevo acuerdo alcanzado con el organismo multilateral, que busca apuntalar el proceso de estabilización económica iniciado tras el levantamiento del cepo cambiario.
La llegada de estos recursos reforzará las reservas del Banco Central, en un momento en que el país busca recuperar la confianza de los mercados y estabilizar el tipo de cambio. Según trascendió, una parte del desembolso será destinada al repago de deuda con el propio Fondo, mientras que el resto quedará como respaldo para intervenir en el mercado si fuera necesario.
El desembolso se produce pocos días después de que el Gobierno anunciara una serie de reformas y medidas fiscales orientadas a lograr un equilibrio macroeconómico. Entre ellas, se destacan la eliminación de restricciones cambiarias, la reducción del déficit fiscal y un nuevo esquema de política monetaria. Desde el Ejecutivo aseguran que estos pasos son fundamentales para restablecer el orden financiero y alentar inversiones.
En los próximos meses, el FMI realizará nuevas revisiones del programa, que contempla metas de acumulación de reservas, ajuste fiscal y reducción de la inflación. El ministro de Economía expresó su confianza en que el cumplimiento de los compromisos acordados permitirá destrabar futuros desembolsos, que serán claves para sostener la hoja de ruta oficial.
Este primer tramo de fondos llega en un contexto de expectativa e incertidumbre. Si bien se celebra como un respaldo importante al plan económico del oficialismo, también genera cuestionamientos sobre el impacto social del ajuste fiscal requerido por el acuerdo. En las próximas semanas, se verá si el oxígeno financiero logra traducirse en una mejora palpable en los indicadores macroeconómicos y en el ánimo de la población.