El presidente cuestionó el funcionamiento de la AFA y volvió a insistir con la implementación de las sociedades anónimas en el fútbol argentino.
Luego de las eliminaciones de Boca Juniors y River Plate en la fase de grupos del Mundial de Clubes 2025, el presidente Javier Milei aprovechó la situación para cuestionar públicamente a Claudio “Chiqui” Tapia y criticar el actual modelo de gestión de los clubes en Argentina. En declaraciones a medios y redes sociales, el mandatario apuntó directamente a la dirigencia del fútbol nacional y pidió reformas estructurales.
“¿Hasta cuándo vamos a seguir sosteniendo este modelo que fracasa?”, expresó Milei, y volvió a poner en debate la propuesta de permitir sociedades anónimas deportivas (SAD) en el país. Según el jefe de Estado, la caída de los dos equipos más grandes de Argentina ante rivales extranjeros demuestra “la decadencia del sistema actual, sostenido por dirigentes que no rinden cuentas”.
El presidente de la AFA, Claudio Tapia, no respondió directamente a los dichos del mandatario, pero desde su entorno calificaron los comentarios como “inoportunos y oportunistas”. En el mundo del fútbol, las reacciones fueron mixtas: algunos dirigentes apoyaron la idea de revisar el modelo, mientras que otros la rechazaron por considerar que pone en riesgo la identidad de los clubes.
La eliminación de Boca, tras empatar con Auckland City, y de River, tras caer frente al Inter de Milán, generó un fuerte revuelo en el ámbito deportivo. Ambos clubes quedaron fuera de los octavos de final, y su desempeño fue blanco de duras críticas en medios locales e internacionales.
El debate sobre las sociedades anónimas deportivas ya había sido impulsado por Milei durante su campaña electoral. Ahora, con el traspié de Boca y River en el plano internacional, el presidente encontró un nuevo escenario para reflotar la discusión y cuestionar el poder de la actual conducción de la AFA.