El gobernador bonaerense desmintió que se deba a la no adhesión de Buenos Aires al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) aprobado por el Congreso Nacional a fines de junio.
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, dio una conferencia de prensa luego de que se conociera que la planta de gas natural licuado (GNL) de YPF y Petronas se hará en Río Negro, y desmintió que la decisión haya sido por la no adhesión del distrito al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI). «Es una venganza del presidente Javier Milei», aseguró.
Este martes se supo que, tras un estudio encargado a una consultora internacional, la elección que primó fue instalar la planta en Río Negro, por sobre la propuesta inicial de construirla en Bahía Blanca, provincia de Buenos Aires. Estará ubicada en la zona de Punta Colorada, en la localidad de Sierra Grande, donde también se llevará a cabo la puesta en valor y modernización de un viejo puerto en desuso con salida al océano Atlántico.
«Dejo clara constancia de que por más de que se trata de una empresa del orden privado, los directivos de YPF son funcionarios del presidente Javier Milei. Lo que observamos ayer fue que funcionarios del presidente Milei tomaron decisiones dictadas por el presidente Milei«, planteó el mandatario bonaerense.
Kicillof definió que «estamos ante un hecho de enorme gravedad, una verdadera irresponsabilidad por parte del Presidente de la Nación, porque como resultado de un capricho absolutamente guiado por cuestiones ideológicas, políticas, está poniendo en riesgo un proyecto muy pero muy importante para el país y para la provincia en el que estamos trabajando hace diez años».
«Desde el día uno en que asumió, Milei no soporta haber perdido las elecciones en la provincia de Buenos Aires. Las tres. Tenemos un mandato que no comulga con su ideología. No lo soporta, entonces ha entrado con las provincias en general, pero particularmente con las que por las elecciones han resultado opositoras, en una disputa permanente. Y le ha sacado cosas a las provincias desde el primer día, en particular a la de Buenos Aires. Por eso no es una novedad que después haya resuelto quitarle una importante inversión y trabajar para que no sucediera acá», aseguró.
Y agregó: «Este es el camino que ha decidido: sacarle a quien no está de acuerdo. Penalizar, castigar, vengarse. Esta es la verdad sobre esta decisión. Es una venganza porque la provincia de Buenos Aires, donde habita el 40% de los argentinos, no lo acompaña con sus ideas de manera mayoritaria. Esto se inscribe dentro de las peores prácticas de la política».