Los oficialismos corren con ventaja, pero la oposición dio la sorpresa en tres provincias.
Tras la elección en Santa Fe, donde el radicalismo volvió al ejectuvo luego de 60 años, ya son 18 las provincias que eligieron quienes serán sus gobernadores a partir del 10 de diciembre y otras dos no definen este año los cargos para ejecutivo provincial. En las restantes, ya se celebraron las PASO.
Si bien la tendencia inicial del año electoral marcó una continuidad de los oficialismos, las generales en las últimas localidades podrían mostrar también un apoyo considerable al cambio.
Este último punto quedó reflejado en las provincias del centro del país. En San Luis, el peronismo perdió una hegemonía de décadas en manos de los Rodríguez Saá ante un exaliado, el exgobernador, Claudio Poggi. En San Juan, Marcelo Orrego puso fin a 20 años de gobiernos del PJ.
Neuquén fue la primera elección y también marcó un cambio de época, un exmiembro del Movimiento Popular Nequino -que gobierna desde hace 60 años- Rolando Figueroa, logró imponerse a la estructura local con un apoyo amplio. Allí, Larreta también se anotó un triunfo.
Por el lado de la continuidad, son diez las provincias que siguen apostando a sus mandatos. Martín Llaryora en Córdoba, Hugo Passalacqua en Misiones, Gildo Insfran en Formosa, Ricardo Quintela en La Rioja, Sergio Ziliotto en La Pampa, Osvaldo Jaldo en Tucumán, Carlos Sadir en Jujuy, Gustavo Sáenz en Salta, Alberto Weretilneck en Río Negro y Gustavo Melella en Tierra del Fuego.