Con quórum propio, los bloques opositores activaron una sesión especial para impulsar una comisión que indague sobre la presunta estafa vinculada a la criptomoneda.
Este martes, la Cámara de Diputados fue escenario de una sesión clave convocada por la oposición, que logró reunir el quórum necesario para tratar la creación de una comisión investigadora sobre el escándalo de la criptomoneda USDLibra. El caso, que involucra denuncias por estafa y perjuicios económicos a miles de ahorristas, generó un fuerte impacto público y motivó reclamos de mayor transparencia por parte del Congreso.
Los bloques que impulsaron la iniciativa —Unión por la Patria, la UCR, Hacemos Coalición Federal y el Frente de Izquierda— coincidieron en la necesidad de esclarecer las responsabilidades políticas y económicas detrás de la operatoria de la moneda digital, que fue promocionada como una alternativa segura y terminó desplomándose abruptamente. La propuesta fue presentada como una respuesta institucional ante lo que califican como un fraude de gran escala.
La comisión investigadora tendrá como objetivo analizar el rol de organismos estatales y actores privados en el funcionamiento de USDLibra, así como determinar si existió connivencia o falta de control por parte del gobierno nacional. Algunos diputados apuntaron especialmente contra funcionarios del área económica y contra empresas vinculadas a la promoción del criptoactivo.
Desde el oficialismo, en cambio, rechazaron la iniciativa y denunciaron un intento de «montar un show político». Alegaron que ya existen instancias judiciales abiertas para investigar el caso y que la creación de una comisión parlamentaria puede entorpecer el debido proceso. A pesar de esa postura, no lograron bloquear la sesión ni impedir el avance del proyecto.
El caso USDLibra sigue generando repercusiones tanto en el plano político como en el financiero. La conformación de la comisión investigadora será clave para establecer responsabilidades institucionales y podría derivar en citaciones a exfuncionarios y empresarios involucrados. Mientras tanto, los ahorristas afectados esperan respuestas concretas y algún tipo de reparación por los daños sufridos.