Naciones de distintos puntos del mundo respaldaron el proyecto de aumentar su capacidad instalada de molinos eólicos y paneles solares, entre otros.
La Presidencia de la COP28, la conferencia de la ONU sobre cambio climático que se celebra en Dubai, anunció que 116 países firmaron un compromiso para generar más capacidad instalada para desarrollar energías renovables hasta el año 2030. Las naciones se comprometieron para «trabajar juntas» en la tarea de triplicar los 3.400 gigavatios (GW) que se producen con molinos eólicos, paneles solares, represas hidroeléctricas, entre otros.
De esta manera, los países decidieron llevar la fabricación de este tipo de energías a 11.000 gigavatios. Ese objetivo tiene en cuenta «los diferentes puntos de partida y circunstancias nacionales» de cada lugar, precisó el comunicado de la Presidencia de Emiratos Árabes de la conferencia, según la agencia de noticias AFP.
A fines de 2022, las capacidades globales eran de 3.372 GW, según datos de la Agencia Internacional de Energías Renovables (Irena), en las que la energía hidráulica (37%) y la solar (31%) son las predominantes. El compromiso asumido por estos países hace referencia a la tasa anual de eficiencia energética, que determina el consumo de diferentes dispositivos, la que apuntan a duplicar para finales de esta década.
Esta firma para incrementar la utilización de energías renovables, si bien es una de las prioridades establecidas por la presidencia emiratí de la COP28, no es vinculante.
A partir del año 1995, con la primera celebración de la COP, los países participantes establecieron que la emisión de gases de efecto invernadero comprende la principal causa del cambio climático global, cuyo índice llegó a niveles preocupantes durante el último año. El sofocante calor que marcó una temperatura récord en Brasil así como las olas de calor que azotaron a Europa en el mes de julio provocaron las advertencias reiteradas desde la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Actualmente, las previsiones apuntan a un crecimiento de temperatura de entre el 2,1% y el 2,8% con daños que serán irreversibles, según los especialistas, que pueden convertir al planeta en un lugar inhabitable.