Las autoridades lograron mitigar algunos focos, aunque el incendio en el parque nacional continúa con cientos de hectáreas afectadas.
Bomberos, brigadistas y fuerzas provinciales trabajaron intensamente para contener tres incendios forestales en Córdoba, mientras el fuego central en el Parque Nacional Quebrada del Condorito sigue activo. Las condiciones climáticas —vientos y baja humedad— complican la tarea de los equipos en el terreno.
En Quebrada del Condorito, las llamas ya afectaron un territorio estimado en cerca de 1.900 hectáreas. Los operativos apuntan a frenar el avance del perímetro y proteger áreas con alto valor ecológico y poblaciones vecinas. Se priorizan cortafuegos y líneas de acción coordinada entre los distintos cuerpos de emergencia.
Las autoridades declararon alerta y solicitaron colaboración ciudadana: piden evitar el uso del fuego en zonas rurales, respetar los accesos cerrados y reportar nuevos focos al 911. Además, se evalúa el despliegue de más recursos, incluidas aeronaves, si la situación empeora.
La batalla contra el incendio continúa sin certezas aún sobre el eventual control total. La magnitud del siniestro resalta la fragilidad de los ecosistemas serranos y la urgencia de políticas integrales de prevención y gestión del riesgo en las zonas forestales.