Un informe de la Facultad de Economía de la UBA asegura que un 36,7% de los trabajadores en relación de dependencia no están registrados.
El empleo informal registró un aumento en el tercer trimestre de 2024 en comparación con el mismo período del año anterior, según un informe de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
El estudio, elaborado por el Área de Empleo, Distribución e Instituciones Laborales (EDIL) del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), señaló que la tasa de informalidad entre asalariados fue del 36,7%.
«La tasa de informalidad se ha mantenido relativamente constante y en un valor muy elevado desde hace 16 años», aclara el informe donde especifica que casi 4 de cada 10 trabajadores en relación de dependencia no están cubiertos por la legislación y las instituciones laborales.
La tasa de informalidad es más elevada entre las mujeres (38,9%) que entre los hombres (34,2%). En la división por grupos etarios, los más afectados son los jóvenes (64%). Las regiones Noroeste, Cuyo y Nordeste son las que exhiben las tasas más altas, con valores superiores al 40%.
Las cifras también difieren según la actividad: servicio doméstico (76,3%) y construcción (67,3%) son los sectores con tasas más altas, mientras que servicios financieros (24,1%) y sector público (9,1%) son los que presentan menos empleo informal.
Una de las principales conclusiones del informe es que el 59% de los trabajadores informales recibe un salario inferior al valor de la canasta básica, lo que agrava la pobreza laboral. Para los trabajadores formales, solo un 8% recibe ingresos por debajo de la línea de pobreza. El salario mínimo promedio para el segundo trimestre de 2024 fue de $190.000, mientras que la canasta básica de pobreza ascendió a $238.000.